Madrileña por nacimiento. Melliza por magia, suerte y destino. Viajera alrededor del mundo por necesidad. Corazón dividido entre, arte de las palabras y la ciencia empírica de la medicina. En continúa evolución y transición, aprendiendo día tras día. Escribo a partir de los puntos de inflexión, de situaciones y de personas.
lunes, 28 de diciembre de 2015
Inocente.
viernes, 25 de diciembre de 2015
Tú, siempre tú.
Y es que en verdad me gustas cuando vienes y sin una sola razón clara te quedas. ¡Vienes para quedarte!
Me chilla a voz en grito mi corazon a mi cabeza sonriendome hacia dentro, aunque tu no lo veas.
Y también me gustas cuando te paras y disimuladamente me miras.
Y yo claro está, te ignoro para que sigas.
Porque se que disfrutas del trayecto de tus pupilas hacia las mías, las cuales han dejado de tener mi color de ojos y cinscubrirse con el tuyo, dejando de lado mi nombre y apropiandose del tuyo.
Me gustas cuando crees que eres verano y tan solo llegas a ser invierno, un invierno calido a punto de estallar en mil pedazos de calor, con aires reinventados y planes sin establecer... como el olor a cafe por las mañanas, el lado frio de la cama en pleno mes de agosto, el olor a un libro nuevo, la tierra mojada en un dia de lluvia, bañarme en el mar en calma, el primer helado de temporada, un beso en la frente antes de dormir, la risa que mis amigas y yo desprendemos al vernos, reconocer la colonia entre la gente, reconocer tu olor, quitarme los tacones de 16 centimetros nada mas llegar a casa y sentirme volando en una nube.
Me gustas tu y con tus "arribas"en demasiados tejados y tus "abajos" en tan solo un sótano, mi sótano.
Y me gustas porque ... te conviertes en una fuente de energía intransferible, me quemas unos instantes antes de abrazarme y no veo otra cosa que no sean los rayos de electricidad estática que despiertan cada una de mis neuronas.
Me gustas cuando me partes el cielo en dos, y no digo como esos horribles dias que el cielo se parte para que caiga un chaparron, no, yo me refiero a esos dias en los que todo parece ir mal y el cielo se abre para que salga el sol, tú, metaforicamente eres el sol, el que abre el cielo, solo para que yo pueda disfrutar del sol un rato más y alargar los días del invierno, los cuales se nos hacen cortos y eternos.
Me gustas también, cuando me hablas con tu silencio a gritos lleno de palabras que transmiten más que cualquier vocal hablada.
Aunque me gustas mucho mas cuando me dices muy bajito, sólo para mi debil odio eso de..“no te quedes con ganas, quédate conmigo”.
Me gustas cuando me respondes a esas preguntas que no me atrevo a hacer y cuando me das la respuesta que sabes que siempre he querido oir y tener.
Me gustas cuando, sin quererlo, tus despedidas pierden el sentido de la palabra y se convierten en eternas bienvenidas. Me gustas cuando, incluso antes de decirte no, sabes que es un sí sin duda alguna.
Me gustas cuando me lees de norte a sur sin perderte ni una sola de mis comas, y en tiempo récord hablas mi idioma. Me gustas cuando dices que buscarás una tumba de dos, que la distancia en nuestro caso está sobrevalorada. Me gustas en cada una de tus contradicciones. En cada uno de tus pasos. En cada una de tus rarezas. En cada una de tus taras. En cada una de tus vivencias. Y es que me gustas siempre. Siempre, tú.
Dime.
Y punto.
-Con el miedo de no encontrarte-
Voy a buscarte.
Como busca la primavera al verano,
y así.
No se si me explico, o más bien,
no se si me entiendes.
Voy a buscarte en los atardeceres aranjados de Madrid,
en las playas tropicales del Mediterráneo,
en las noches entre tintos y terrazas,
oscuras,
céntricas,
bulliciosas -y a la vez silenciosas-
Voy a buscarte en ultimas
-y sobre todo en primeras- noches.
En noches intensas.
Irracionales.
Inolvidables.
Voy a buscarte en mitad del desierto, o en mitad del infierno.
Voy a buscarte,
con sed y sin agua.
Y esto, querido Mío, es solo para que lo sepas.
Para que sepas que voy a buscarte,
y que corremos varios riesgo,
Yo el de alcanzarte y tu el de dejarte encontrar.
-por mi-
a escondidas,
y besar tus sombras, sin que te dieras cuenta.
Espantar todos y cada uno de tus fantasmas, si acaso los tuvieras.
Observarte,
observar cómo lees, u odias leer mejor dicho.
Observar cómo subrayas cada línea que roza algún punto dentro de ti,
y te excita.
Ojalá pudiera verte enamorado,
enamorado a solas,
en silencio,
y besarte,
besar tu mejilla,
o si se me escapara, en la comisura de los labios -un beso sin pecado-
Ojalá pudiera verte somnoliento,
arisco,
recién despierto de un sueño,
un sueño mucho más acogedor que la realidad
cualquier sábado de resaca-.
Ojalá pudiera tocarte,
tocar todo tu cuerpo,
tocarte entero.
Saber que .. ¡Estás a salvo!
Porque a salvo es como debes estar,
tu cuerpo está vivo,
tú, estás vivo.
Y, mientras otras personas celebrarían que les dirigieras un par de palabras, yo voy mucho más allá;
yo celebro a cada instante el milagro que eres,
celebro que existes,
que respiras,
qué estás,
y que estás en definitiva en este mundo,
en mi pequeño mundo,
y que probablemente, esta vez no tenga miedo de que te vayas,
si no que este feliz porqué te quedes.
Votos precordiales.
Quieres que te diga lo que pienso, y cuando voy a hacerlo ..
Quieres que sea yo,
Quieres que te demuestre las cosas,
Una especie de contigo ni sin ti,
Me gustabas más cuando no me gustabas,
Creo que eres tú más cuando tienes algo por hacer,
O no,
Tampoco lo sé, tampoco se si quiero saberlo
Pero .. ¿Te he dicho ya, que me pierdes?
Fíjate si me pierdes, que no me encuentro ni escribiendo -te- .
Ni voy a vivir por, ni para ti,
No voy a estar, ni quiero ser,
Tranquilo,
Quiero relax,
Quiero que te quites el miedo que me tienes,
Yo te voy a querer incondicionalmente hagas lo que hagas
Quiero que me cuentes secretos que nadie mas sabe.
Quiero que te abras y que me dejes abrirme contigo ...
Y como creo que llegados a este punto ya te habrás puesto los zapatos y estarás cogiendo las llaves para huir -otra puta vez-,
Con esto quiero decirte que por una vez no voy a iniciar algo que sea real, y sencillo desde el principio, porque lo que mal empieza, mal acaba,
Quiero ... Dejarme llevar,
Atrevete, da pasos.. Siempre hacia delante,
Deja de intentar poner nombres a algo que jamas,
Fantasmas del pasado.
Ayer me he encontré con un fantasma.
Y no, no me refiero a una persona hetereamente inexistente.
Me refiero a un fantasma del pasado.
Como en la peli esa de "los fantasmas de mis exnovias" pues idem.
"Car ... Eres tu?" Preguntó, como si la vida me hubiera hecho cambiar tanto que casi no me reconociera.
Yo, al oír "CAR" se que se trataba de alguien que está, o ha estado en mi vida.
Y efectivamente, al girarme ahi estaba un "fantasma del pasado"
He de reconocer que me hizo tanta, tantísima ilusión que llegue hasta un punto de inflexión en el que pensé el porque salió de mi vida y el porque yo salí de la suya.
Hablamos y hablamos, y la sonrisa de la cara sinceramente no se me iba.
Me hacia ilusión, estaba feliz por haber visto a aquella persona, que estuvo en mi mente cierta parte de mi vida.
Hablamos de los cambios que había hecho, de los cambios que habíamos hecho ambos.
Hablamos de la carrera/trabajo/amigos/ nuevos conocidos/novios/ex/compañeros/hermanas/hermanos/familia ... Se hizo eternamente efímero.
Y cuando llego el momento adecuado, nos dimos dos besos, un abrazo y dijimos casi a la par "hasta pronto, me ha encantado verte, ah! Y feliz navidad"
Así, tal cual, como si mañana mismo nos viéramos de nuevo.
Me quede tiempo en shock, no entendia como alguien que ha estado en nuestra vida, con la que hemos compartido cosas preciosas, vivencias, que hemos aprendido a madurar... Se va.
Al volver a casa estaba emocionada, me puse mi música y me disponía a continuar leyendo "guia farmacologica de administracion de farmacos por via enteral y parenteral"
Pero algo, una idea, conjetura, llego a mi mente y es que puede que tenga razon y haya que dejar ir a gente para que aparezca gente nueva, gente mejor, pero puede también que probablemente tenga razón al pensar en que ..
el pasado tiene que estar en nuestro presente para ayudarnos en el futuro. Aunque sea estar en nuestra vida en silencio, o aunque sea muy bajito.
Porque sin pasado, lo queramos o no,
viernes, 18 de diciembre de 2015
Felicidad.
Alli.
lunes, 14 de diciembre de 2015
A m o r. Con A
martes, 8 de diciembre de 2015
Flechazos.
Magia.
martes, 1 de diciembre de 2015
Diciembre
lunes, 23 de noviembre de 2015
Para siempre.
lunes, 9 de noviembre de 2015
Recuerda que ...
domingo, 8 de noviembre de 2015
Lunes.
lunes, 2 de noviembre de 2015
Vendrá.
domingo, 1 de noviembre de 2015
Acuérdate de
sábado, 31 de octubre de 2015
Sensaciones.
Algo así.
Jamás.
jueves, 22 de octubre de 2015
Son aquellas pequeñas cosas.
domingo, 18 de octubre de 2015
Te ofrezco y te prometo.
viernes, 16 de octubre de 2015
Yo, mi, me, conmigo.
martes, 29 de septiembre de 2015
Te necesito.
lunes, 21 de septiembre de 2015
Juego de palabras.
Talones de Aquiles.
Dicen que no existe la falta de tiempo, que existe la falta de interés,
porque cuando la gente realmente quiere, la madrugada se vuelve día,
martes se vuelve sábado y un momento se vuelve oportunidad.
Quien mucho espera, se decepciona y sufre. La verdad es que la falta
de interés duele, y mucho. Va más allá de la decepción, son crueles
punzadas de dolor en el estómago, como si algo por dentro nos desgarrara
el alma.
La verdad es que tanto el tiempo como los daños nos cambian, haciendo
que lo que hoy nos apetecía compartir mañana no nos resulte tan atractivo.
No obstante, esto no justifica la falta de sinceridad ni de correspondencia
con los demás.
Aceptar la falsedad del tiempo vivido
Tristemente, la falsedad y la hipocresía son tan resbaladizas que
solemos encontrarlas en el rincón que menos esperábamos cuando ya
es demasiado tarde. Normalmente, la esperanza de que alguien es lo que
creemos conocer nos hace estar tranquilos cuando en realidad deberíamos mantenernos expectantes.
Entonces es cuando vienen los problemas, pues la verdad es que abunda la
gente interesada y a nosotros nos cuesta abrir los ojos. Esto ocurre porque
nos resistimos a creer que alguien a quien consideramos tan indispensable
en nuestra vida no sea sincero.
Normalmente, las personas falsas o interesadas son aquellas que ni comen
ni dejan comer y que cuando les pides explicaciones se enervan intentando
evadir la confrontación que les hemos planteado.
En ocasiones perdemos el tiempo insistiendo en ver a alguien que no
hace nada por vernos y en forzar situaciones que creemos necesarias.
Solemos caer en el error de buscar sin permitir que nos encuentren lo que
al final resulta en un maltrato a nuestra dignidad.
Cuando nos damos cuenta de esto, hay algo que se rompe en nuestro
interior y nos invade una ola de decepción, de miedo y de tristeza. En ese
momento, nos percatamos de que no podemos esperar a quien no quiere
ser esperado.
Entonces empieza todo un duro proceso de protección que requiere que recubramos nuestra vida de comprensión y que prohibamos la entrada a
todas aquellas personas que nos dañaron y se comportaron de manera
interesada.
Rodéate de las personas que te gustan y sé feliz
Comprométete con aquellos valores que te resultan fundamentales,
disfruta de la sensibilidad, de la bondad, del respeto, de la humildad, de la
confianza y la fe, de la gratitud, de la sabiduría, de la sinceridad, del amor,
de la amistad, del cariño y de la incondicionalidad.
Mantén cerca de ti la mejor realidad que conozcas, deshecha lo vil y lo cruel,
no prestes atención a las personas toxicas, busca tu oxígeno, cuenta hasta
tres y respira.Siente las bocanadas de aire psicológico y saluda a tus
emociones.
Rodéate de toda esa gente que te hace sentir que el mundo es un lugar
que merece la pena y que tu caparazón solo está contigo para que te
resguardes en los días de lluvia. Rechaza en tu vida a todos aquellos que te
hacen sentir menospreciado y que no te dedican ni un momento sin que
tengas que rogarlo.
Libérate de todo lo que te aprisiona, y permite que la vida te sorprenda, sin
necesidad de dañarte.
No esperes nada de nadie, espera todo de ti.
El resto llega, cuando menos te lo esperes.