algo de lo cual, el ser humano a pesar de sus millones años de evolución,
aún está reaceo a aceptar.
Y es que
en verdad lo que llamamos,
Amor.
Enamoramiento.
Querer.
Desear.
Estar en pareja.
Es tan solo un proceso bio-químico que ocurre en nuestro cerebro, y a lo cual podemos relacionar con droga.
Con pura adiccion drogadicta.
¿Estaría mal pensar que un enamorado, es en verdad un drogadicto?
No.
Y diez mil veces no.
A lo largo de mi vida, no solo de estudiante de ciencias.
Si no como mujer,
de niña a mujer,
de relaciones de una noche,
y de relaciones de años también.
De sexo desenfrenado y de "amor"
obviamente creo que si.
A lo largo del tiempo, los años, los daños ...
he podido comprobar cómo es,
como es,
que es,
que causa ...
la adiccion,
la mayor adiccion del universo en la que incluso el más ateo a creer,
cede,
cae
se vicia,
se enjaula,
A el amor.
Lo he sentido,
si,
y también me he permitido el lujo,
lo siento señores románticos,
pero me he permitido el lujo de compararlo con mi adición a fumar,
esa que hago a escondidas,
esa que ocultó que hago
y esa que no quiero hacer,
pero que al final, caigo y recaigo...
Pero...
que puñetas, ¿que diferencia hay entre fumar y enamorarse?
Ambas me producen lo mismo.
Exactamente lo mismo.
Para los ingenuos que no me creen,
o más bien para los que creen que el amor les salvará de esta vida de mierda.
Estáis locos, chiflados, y lo peor de todo.
Os autoengañais.
Lo sé, es duro, pero es verídico.
Os autoputoengañais, de que un sentimiento no volátil, influya más que vuestros neurotransmisores favoritismos.
Y si, digo favoritismos,
porque dadles las gracias,
las mil gracias a
la señora dopamina,
la señora serotonina,
la señora noradrenalina,
Y las oxitocina y vasopresina.
Encargadas de hacer un todo vuestro cuentito de hadas, se haga realidad.
La querida dopamina inunda nuestro cerebro, hará que veas a esa persona como "única" "especial" sentirás una pequeña "euforia" cada vez que la veas, cada vez que la hables, cada vez que te hable, tendrás pérdida de apetito e insomnio, o más bien las llamadas "mariposillas en el estomago", sentirás un temblor, unas palpitaciones como si el corazón de te escapase del pecho, y se te incrementará la frecuencia cardiaca a 120 ppm, tendrás calor, ansiedad y cambios de humor.
Bienvenido, estos efectos son los mismos que te producirían la cocaina y las anfetaminas.
La señorita noradrenalina aumenta su capacidad de acción y hará que cualquier estímulo de la persona "amada" sea un factor de recepción hacia ti, es decir solo veras lo positivo de ese alguien sin fijarte en lo negativo, será perfecto, lleno de imperfecciones.
Y llegamos a la serotonina, y no por ello la menos importante, está será la que se desplome para dejar paso al transformó obsesivo compulsivo y drogradictivo del amor.
A continuación damos paso a dos de las hormonas llamadas oxitocina y vasopresina, que por su largo y común trayecto científico sonaran más, estas concluyen llenando vínculos de placer y deseo entre la otra persona y nosotros, para que estas dos hormonas sean producidas es esencial el placer sexual, es decir cuando una pareja llega al culmix de relación, tiene un boom de neurotransmisores, hormonas bajadas y subidas que hacen que se forme un boom de sensaciones y se cause el llamado "enamoramiento" "amor"
Amar con todo el cerebro.
Amar con drogas.
Y es que en tan solo el medio segundo que se tarda en generarse ese boom, es lo que tardamos en enamorarnos.
Lo malo de todo esto, es que es totalmente cierta esa frase de ...
Del amor al odio, en tan solo un paso.
Cierto ya que se muestra que tanto el amor como el odio estimulan las mismas regiones cerebrales pero mientras el amor ihnibe las zonas de la racionalidad, el odio las hiperactiva.
Por ello del amor se puede convertir en odio, en tan solo un paso. En cuanto el amante no ve su suerte en la persona amada, entra en un círculo de odio, de rabia y de ira hacia la persona amada.
Y esto sentimientos son los que se sienten cuando te rompen el corazón.
Y hasta aquí puedo decir,
leer,
y hasta escribir.
Y lo sé.
lo sé, y
lo siento.
El amor romántico es falso.
El amor es droga.
Pura droga mala.
Que te envenena y te hiere sin que tú quieras.
Y el amor no existe.
Todo está en la mente,
todo está en el cerebro.
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